Presidente de la U.de Chile confirmó que no hay muertos tras pelea contra hinchas de Independiente

Michael Clark, presidente de Universidad de Chile, confirmó esta mañana que no se registraron víctimas fatales entre los aficionados chilenos tras los graves incidentes ocurridos durante el partido de vuelta por los octavos de final de la Copa Sudamericana contra Independiente, en el Estadio Libertadores de América. El encuentro, que finalizó empatado 1-1, fue suspendido por la Conmebol debido a disturbios entre hinchas de ambos equipos.
En una declaración a los medios tras visitar el Hospital Fiorito, Clark señaló: “Lo de ayer fue una tragedia, de milagro no hay muertos. Habían 12 personas hospitalizadas, hoy solo quedan cuatro y lo más probable es que hoy se les dé de alta a dos más. De las otras dos personas, una está muy grave, pero está mejorando y evolucionando bien”. El directivo enfatizó que la prioridad del club es la recuperación de los hinchas afectados, dejando en segundo plano las cuestiones deportivas.
Los incidentes comenzaron cuando un grupo de hinchas de Universidad de Chile, ubicados en la tribuna superior, arrojó objetos como butacas, palos y bombas de estruendo hacia la parcialidad local en la bandeja inferior. Esto desencadenó una respuesta violenta de la barra de Independiente, que ingresó al sector visitante y agredió a los hinchas chilenos que permanecían en el lugar. Según reportes, 22 personas fueron trasladadas a hospitales, con dos hinchas chilenos en estado grave que requirieron intervenciones quirúrgicas. Además, se registraron más de 100 detenciones, principalmente de aficionados visitantes.El presidente de Independiente, Néstor Grindetti, atribuyó
la responsabilidad a los hinchas chilenos, afirmando que “destrozaron los baños y arrojaron objetos”, mientras que Clark lamentó la falta de organización en el operativo de seguridad, que contó con 650 efectivos policiales y 150 agentes privados, pero no logró contener los disturbios. La Conmebol anunció la cancelación del partido por “falta de garantías de seguridad” y derivó el caso a sus órganos judiciales para determinar sanciones y el resultado de la llave.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, condenó los hechos a través de su cuenta en X, destacando “la evidente irresponsabilidad en la organización” y asegurando que la justicia determinará a los responsables. Asimismo, ordenó al embajador chileno en Argentina, José Antonio Viera-Gallo, visitar a los hinchas hospitalizados y detenidos para garantizar su seguridad.
Universidad de Chile, que lideraba la serie 2-1 tras la victoria 1-0 en la ida, espera ahora la resolución de la Conmebol, mientras el fútbol sudamericano vuelve a enfrentar el desafío de erradicar la violencia en los estadios.